.

La alcaldesa de Ciudad Real ha participado en la mesa redonda organizada con motivo de la exposición instalada en el Museo López-Villaseñor en torno a la figura de Álvaro del Portillo, sucesor al frente del Opus Dei de su fundador, San José María Escrivá de Balaguer.

El primer español ingeniero de caminos declarado beato por la Iglesia, como significaba Rosa Romero, y un ejemplo de solidaridad cotidiana, un beato de nuestros días que ha dejado una huella y una estela de alegría, esperanza y cariño en miles de personas de los cinco continentes.

La alcaldesa destacó los rasgos más sobresalientes de Del Portillo, un hombre inteligente, sencillo, humilde, responsable y siempre dispuesto a ayudar a cualquiera que tuviese un problema y desglosó su trabajo en el Opus Dei como el más fiel y leal colaborador durante 40 años de su fundador, artífice de la exposición del Opus Dei y el primer sucesor de Escrivá de Balaguer destacando que durante sus años al frente de la Obra como prelado estuvo al servicio de Dios, de la Iglesia Católica y de los hombres y puso en marcha numerosas iniciativas sociales y educativas en los 5 continentes. Con su beatificación, la Iglesia eleva a los altares a una persona que llevó una vida cristiano ejemplar, concluyó la alcaldesa.