Si la semana pasada las puertas del Ayuntamiento se abrían para recibir al Balonmano Ciudad Real, flamantes campeones de la Liga ASOBAL y de la Super Globe, hoy de nuevo, el salón de plenos se ha vestido de gala para rendir un merecido homenaje al Club Baloncesto Reale Ciudad Real, que el pasado sábado, consiguieron en tierras catalanas, el ascenso a la Liga LEB Plata, un sueño de muchos años que por fin, se hace realidad.

La alcaldesa de la capital, como ya hiciera el pasado sábado nada más conocer la noticia, felicitó de nuevo al cuerpo técnico y jugadores del Reale por conseguir el ascenso, por llevar a lo más alto el nombre de Ciudad Real, y por haber escrito una nueva página en la historia del deporte de esta ciudad. ‘Sois un club modesto, les ha dicho Romero,  que habéis trabajado desde la humildad, un trabajo silencioso y callado que hoy ya tiene su recompensa’.

Rosa Romero también quiso elogiar la labor que ha realizado Enrique Evangelista al frente de este equipo, 'un apasionado del baloncesto a quien no le ha importado luchar contra molinos de viento, llamar a muchas puertas para conseguir financiación, e incluso poner dinero de su bolsillo para que Ciudad Real tuviera un equipo en la LEB Plata. El éxito se ha conseguido gracias a la humildad, seriedad y al trabajo'.

Conseguido el ascenso y saboreando aún las mieles del triunfo, ahora hay que ponerse a planificar la temporada 2010 – 2011. El presidente del Reale ya ha manifestado en varias ocasiones su deseo de dar continuidad al proyecto liderado por el entrenador Jesús Muñiz, pero también habrá que pensar en cómo afrontar económicamente esta nueva etapa. Hasta la fecha la ayuda ha venido sólo prácticamente del Ayuntamiento.

Evangelista confirmó que nada mas conseguir el ascenso recibió la llamada de la alcaldesa de Ciudad Real, y de los concejales de Deporte y de Juventud. De momento ninguna otra autoridad política ha felicitado al Reale. 

Rosa Romero entregó en nombre del Ayuntamiento una placa conmemorativa de este acontecimiento al presidente del Club Baloncesto Reale Ciudad Real, así como una medalla a cada uno de los jugadores.