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Con el tradicional corte de cinta y el encendido del alumbrado del ferial, comienzan unos días en los que sólo está permitido divertirse

La algarabía, música y bailes se apoderaron de las calles de la ciudad nada más escuchar el cobetazo. El tradicional desfile de Gigantes y Cabezudos congregó a miles de ciudadrealeños que esperaban con emoción ver a estos divertidos personajes…

Los niños fueron sin duda los que más disfrutaron, como si fuera 5 de enero, se apresuraban a coger los caramelos que repartían las peñas y asociaciones de la capital. Aunque algunos peques decidieron no acercarse demasiado a estos caballeros, princesas y animalitos, otros se quedaban entusiasmados deseando comprobar la realidad de estos ídolos de ficción.

Al ritmo de la música también desfilaron el Pandorgo, las dulcineas y miembros de la corporación municipal. La fiesta se palpaba en el ambiente y es que todos los ciudadrealeños saben que hasta el próximo día 22 las penas y problemas se guardarán en un cajón y sólo habrá tiempo para la diversión.

Como ya es tradicional, el desfile concluyó en el recinto ferial. La alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero se encargó de cortar la cinta y de encender el arco por el que pasarán miles de personas durante los próximos días.

En declaraciones a los medios de comunicación, Rosa Romero dijo que esta feria ha sido preparada con mucho cariño desde la Concejalía de Festejos, porque con poco presupuesto se ha intentado contentar a todos: los más pequeños tendrán actividades todas las mañanas en el parque del Pilar, Gasset y Prado; los adolescentes mucha música, y los mayores podrán disfrutar del vermú y de los toros.

Romero también quiso reconocer el trabajo que realizarán durante estos días de feria todos los servicios municipales que se encargarán de que la ciudad brille con luz propia. Arranca la feria de la capital y todos están invitados a disfrutar de ella.