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El alcalde y el primer teniente de alcalde valoran satisfactoriamente los primeros cien días de gobierno

El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, y el primer teniente de alcalde, Ricardo Chamorro han valorado en rueda de prensa los primeros cien días del gobierno de coalición de Partido Popular y Vox al frente del Ayuntamiento de Ciudad Real. Un inicio de mandato del que se han mostrado satisfechos por el trabajo realizado, centrado principalmente en plasmar “un cambio efectivo en la forma de gobierno”, con un consistorio abierto a los ciudadanos, dando respuesta a los problemas de personal que se han encontrado en las concejalías y “desentrañando la vorágine de anuncios sin contenido del gobierno anterior”.

El primer edil ha repasado algunas de las primeras medidas adoptadas en estos cien días, como la eliminación de la obligatoriedad de la cita previa para la atención al vecino en la administración local. “El PSOE convirtió al Ayuntamiento en un búnker y eso se ha cambiado desde el minuto 1”, ha dicho Cañizares, quien considera además que en este corto periodo de tiempo la agilidad de la respuesta que se ha dado en las sustituciones de personal en áreas como limpieza se ha traducido en una notable disminución de quejas a través de la aplicación “Línea Verde” en el tercer trimestre de 2023 con respecto al mismo periodo de 2022, de 182 quejas en 2023, a 296 en 2022, un 40% menos.

En su intervención ha lamentado los falsos anuncios hechos por el anterior equipo de gobierno que llegó a cifrar en 120 millones de euros los proyectos que el consistorio iba a presentar a convocatorias de los fondos Next Generation, proyectos que, asegura, “no existen, no nos hemos encontrado ni los papeles para poder seguirles el rastro”. Como ejemplos ha citado inversiones necesarias para la ciudad como el desdoblamiento del emisario, valorado en 45 millones de euros, “del que no hay ni proyecto ni dinero”.

Satisfacción con el trabajo realizado

Tanto el alcalde como el primer teniente de alcalde se han mostrado satisfechos con el trabajo desarrollado en estos primeros cien días. Ricardo Chamorro ha aseverado “que hay muy buen entendimiento” y se está trabajando “como un equipo de gobierno unido para cambiar las cosas en Ciudad Real” para avanzar desde la “ilusión y la honestidad”.

Chamorro ha repasado algunas medidas ya puestas en marcha durante este tiempo como la creación de las concejalías de barrio para acercar la administración a los ciudadanos, el incremento de ayudas a la natalidad o las primeras reducciones de impuestos para “crear el ambiente favorable” a la atracción de empresas y a la generación de empleo. También se ha dado solución a los problemas que se han encontrado en algunas partidas económicas que se encontraron “esquilmadas” como las de festejos para que la ciudad pudiera disfrutar de la Pandorga y la Feria, cuyo resultado final ha calificado como “un éxito”.

Proyectos de futuro

Además de la valoración propia de lo ya gestionado, en la rueda de prensa los máximos responsables municipales han avanzado algunas de las líneas de trabajo que van a ver la luz próximamente. Francisco Cañizares ha recordado que uno de los proyectos anunciados por el anterior equipo de gobierno es la rehabilitación de los silos y ha asegurado que el propio presidente del ejecutivo regional, Emiliano García Page, le confirmó en su reciente reunión que ni siquiera se había solicitado su cesión a la Junta de Comunidades, algo que ahora sí va a hacer el Ayuntamiento planteando además distintas opciones para su aprovechamiento futuro en áreas como participación, turismo, juventud y dinamización del barrio.

Y otro de los proyectos enquistados durante muchos años al que se le va a dar respuesta, avanza Cañizares, es la Casa de Cultura. Un proyecto del que el nuevo consistorio tiene que solucionar su falta de financiación, en una obra estimada en más de dos millones de euros, y del que no quieren modificar las líneas principales de lo aprobado el pasado mes de abril. Como compromiso, ha asegurado que incluirá un espacio cultural para poner “en valor la obra de Fisac”. 

La Plaza de Cervantes, ha continuado Cañizares, es otro de los proyectos que denotan la mala gestión anterior. Desde hace meses se detectó el comienzo del hundimiento de una de sus zonas y no se hizo nada desde el Ayuntamiento por solucionar el problema. El nuevo consistorio tiene claro que se debe afrontar la situación para darle solución y, por eso los servicios municipales ya están trabajando para conocer la dimensión real de la situación, practicando una cata sobre el terreno para después tomar las decisiones pertinentes.

En su intervención, Cañizares ha querido “trasladar un cambio efectivo en la forma de gobernar, huyendo de protagonismo estériles”, y con foco en abrir el Ayuntamiento a los vecinos de Ciudad Real.