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Hemos cumplido ya el primer año de la presente legislatura, un año intenso y marcado fundamentalmente por la terrible crisis económica, lo que nos ha hecho sacar lo mejor de nosotros mismos para, en un ejercicio de previsión y responsabilidad, intentar paliar los devastadores efectos que sobre la economía, y en especial sobre las personas, tiene la misma.

Ante tal realidad, no cabía otra cosa que trabajar desde la dedicación y la cercanía con todos, escuchando e intentando aportar soluciones reales a los problemas de la vida cotidiana de nuestros ciudadanos.

Soy una firme defensora del municipalismo y del papel que ejercen los Ayuntamientos como administraciones más cercanas al ciudadano y, por tanto, las que atienden las necesidades más inmediatas de la ciudadanía. Por ello, mi obsesión ha sido ser ejemplo y punta de lanza a la hora de apretarse el cinturón, comprometiéndome a desarrollar la actividad administrativa municipal bajo los principios de austeridad, eficacia, transparencia y lealtad institucional.

En este año, hemos dado muestras sobradas de ser un gobierno austero, transparente y eficaz y hemos estado a la altura de la misma confianza que pedimos a los ciudadanos porque, desde el primer momento, hemos sido conscientes de la situación de crisis económica a la que había que hacer frente de una forma decidida. Por ello, la primera medida que pusimos en marcha fue el Plan de Garantía de los Servicios Básicos Municipales, con el objetivo de ahorrar 3.200.000 euros para garantizar así los servicios básicos de una forma sostenible, priorizar el pago a pymes y autónomos y mantener el compromiso con las políticas sociales.

Que este programa ha dado sus frutos lo avala el dato oficial de que Ciudad Real es la capital de provincia con menos deuda viva de toda Castilla-La Mancha, y eso es porque hemos trabajado con previsión y porque nuestra máxima prioridad ha sido gestionar bien y mirar por el dinero que es de todos los ciudadrealeños. Vamos por la senda correcta, la de la contención del gasto y la austeridad, que es el camino correcto para recuperar nuestra economía y generar empleo.

Es justo reconocer que el Real Decreto aprobado por el Gobierno de Rajoy ha supuesto una inyección de liquidez a la ahogada economía local, que en el caso de Ciudad Real ha resuelto el que podamos liquidar las facturas pendientes, más de 300, de proveedores por un importe de más de 11 millones de euros.

Y hemos eliminado lo superfluo, actuando con responsabilidad y lealtad hacia nuestros vecinos y administrando de la mejor forma posible los recursos que son de todos, porque los proyectos, grandes o pequeños, sólo se logran cuando las administraciones públicas gestionan desde la austeridad.

Pero la crisis en la que estamos inmersos, la más grave en muchas generaciones, tiene también una dimensión social, además de económica e institucional. Una dimensión que tiene rostro, el de las familias sin trabajo. Esa es mi primera preocupación y la prioridad de mi política.

El Ayuntamiento como tal no es un generador de empleo, pero sí puede y debe crear las condiciones para que las iniciativas públicas o privadas puedan encontrar medidas y oportunidades que lo promuevan y favorezcan. Por tanto, la inversión que hemos hecho este año ha sido productiva, pues hemos apostado y apoyado aquellos proyectos, como el Centro Deportivo Go Fit o la nueva Residencia de Mayores, en construcción, que actuarán como generadores de trabajo, riqueza y bienestar.

Junto a la creación de empleo, otro pilar básico de mi acción de Gobierno han sido las políticas sociales y la ayuda a los que más lo necesitan.

No niego que habremos escatimado en muchas cosas, pero no, desde luego, en aquellos colectivos más desfavorecidos, impulsando medidas para favorecer la inserción social y familiar de nuestros mayores, jóvenes, niños y personas con discapacidad. En este balance, puedo afirmar con orgullo, que hemos mantenido el programa de nutrición infantil, con 650 becas de comedor; el de ayuda al nacimiento (2.423 cheques-bebés favorables desde 2007); las 45 plazas de la Escuela Infantil, ayudas a 25 familias para el pago de guarderías, 100 plazas en las ludotecas municipales y los programas de ayuda a domicilio, de los que se benefician más de 229 mayores, así como el servicio de 50 comidas a domicilio.

Tampoco hemos escatimado en el futuro de nuestros jóvenes y niños. Echando imaginación y haciendo más con menos, hemos logrado dar cobertura, a través de las escuelas deportivas, actividades educativas, de ocio y formativas y con el objetivo además de facilitar la conciliación, a más de 65.000 niños y jóvenes que con su participación masiva respaldan el esfuerzo que estamos haciendo por atender sus demandas y necesidades.

No es momento de proyectos inasumibles económicamente porque la realidad nos ha obligado a poner los nuevos mimbres que garanticen retomar la senda de crecimiento. Y eso es lo que hemos hecho, un año de trabajo intenso en el que los 15 hombres y mujeres que formamos el equipo de gobierno, nos hemos dejado la piel, sin escatimar esfuerzos y con dedicación plena de servicio a nuestros ciudadanos, por sentar nuevas bases que propicien un futuro mejor para nuestra ciudad. Yo creo en Ciudad Real, en su futuro y en sus gentes y por eso estoy convencida de que vamos por el buen camino y que en un plazo no muy lejano, vamos a ver crecer a nuestra ciudad con más empleo y progreso.

Sigo con la ilusión y las ganas intactas de tirar para delante. Entre todos, vamos a ser capaces de conseguirlo. Agradezco el apoyo, la complicidad, el cariño, la compresión y la confianza que día a día recibo de todos mis vecinos y os pido como hice hace un año, vuestra ayuda y colaboración.